IROKO
El iroko es una madera africana. Es un árbol muy grande, de tronco cilíndrico y liso. La madera del iroko tiene un color que varía entre el pardo amarillento y el pardo oscuro. Generalmente la fibra es entrelazada y, algunas veces, irregular. Es parecida a la teca, pero su textura es más gruesa, es algo más ligera y carece del olor característico y del tacto grasiento. Tiene gran durabilidad y, siempre que la dirección de la fibra sea continua, es más estable que la teca. Puede ser aserrada y trabajada sin dificultad.
La madera del iroko presenta una combinación de propiedades muy favorables y, en comparación con otras, resulta muy económica. Es adecuada para las mismas aplicaciones que la teca aunque carece del efecto decorativo de ésta, por lo que es poco utilizada para la fabricación de muebles interiores. Puede ser empleada, en mostradores y bancos, tableros contrachapados, carpintería exterior, parquets, tarimas, ebanistería, torno…